El nombre formal de la Iglesia —La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días— es una parte esencial de su identidad mundial. Es el nombre que le dio el Salvador (véase Doctrina y Convenios 115:4). Ya que cada palabra del nombre de la Iglesia es significativa, el uso debido del nombre puede ayudar a las personas a entender mejor lo que es la Iglesia (véase 1.1). Para obtener más información acerca del nombre de la Iglesia, véase 4.2.3.
Se puede conocer más acerca de la importancia y el significado del nombre de la Iglesia en estos materiales:
Utilice siempre las pautas vigentes relativas al uso del nombre de la Iglesia.
Siga estas pautas en cada comunicación de la Iglesia: